domingo, 23 de septiembre de 2012

Lecturas

Criadas y Señoras (The Help) de Kathryn Stockett. Traducción: Álvaro Abella


Me interesé por este libro debido al éxito de la película del mismo nombre, la cual no vi en el cine y por ello la tenía en mi lista de libros por leer. Llevo un tiempo absteniéndome de leer libros de autores estadounidenses, quizás porque muchos de ellos llenan páginas de frases y palabras empalagosas, y más cuando entre sus capítulos se encuentra uno de esos que solo sirven de relleno.
Creo que la mano del traductor juega un papel muy importante a la hora de llevar una obra a otro idioma, sin embargo el estilismo de la autora es evidente en cada uno de los capítulos. Es un libro ameno, se lee con mucho agrado, te transporta a la época en la que está situada la historia y en ningún momento se tiene la sensación de aburrimiento. La imaginación vuela y te conviertes en observador de las escenas que se van narrando y cada capítulo es un cúmulo de emociones que no te dejan indiferente. Cada uno de los personajes narra sus miserias y sus alegrías. 
Nos encontramos en los años 60, en Jackson, Misisipi. La joven Skeeter que acaba de terminar sus estudios aspira a dedicarse a la literatura. Regresa a casa y sueña con una vida diferente, la cual no es precisamente casarse y tener hijos. En la mayoría de los hogares las sirvientas son negras y las señoras blancas, y teniendo en cuenta lo que oyen y ven, sus historias son las que lleva a esta joven a creer que su sueño puede tener una oportunidad. Aibeleen, una criada negra, está volcada en la educación de la niña que tiene a su cargo, para olvidar la muerte de su hijo. Su mejor amiga, Minny, conocida por su rebeldía, encuentra trabajo en casa de una familia recién llegada que aún no conoce su fama. Cuando Skeeter conoce las historias de Aibeleen y Minny empieza a imaginar un proyecto clandestino y liberador. Estas tres mujeres unirán sus esfuerzos para rebelarse contra un orden social injusto y los prejuicios de una pequeña ciudad. Con Criadas y Señoras, Kathryn Stockett ha logrado situarse entre los autores más leídos, y los críticos no han dudado en considerar su ópera prima como todo un clásico contemporáneo. Por ello, merece un lugar en mi biblioteca y también recomendarlo.