domingo, 20 de julio de 2014

Enhebrando la aguja, hilvanando recuerdos

© Spinoza AC


Después de muchos años he vuelto a poner manos a la costura. Sin darme cuenta y a medida que iba hilvanando las partes de lo que se convertirá en un pantalón, mi mente se activó con recuerdos del pasado. Recuerdos de cuando mi abuela me pedía que le enhebrara la aguja porque su vista cansada ya no veía, sin embargo no dejaba de remendar los siete de aquellos pantalones enganchados en cualquier lugar, o poner parches en las rodillas en los mismos para que durasen un tiempo más, o buscar en el costurero (una antigua lata de galletas) un botón similar que le faltaba a una camisa.

Luego con el transcurso del tiempo fue mi madre, la que también me pedía lo mismo. Cuántas veces la he visto reparando los agujeros que se hacían en las medias, o cosiéndose para ella faldas o pantalones, o levantando el ruedo de pantalones (con su costurero de lata de galletas).

Yo también aprendí a coser, de esto hace muchísimos años atrás.  Mi primer trabajo fue una vestido, luego vendría una falda, una camisa, y la emoción de ser creadora de mis propias prendas de vestir. Desde luego que no iba para costurera, pero fue una época muy divertida. Con el transcurso del tiempo cosí vestidos y pantalones, a mis hijos, qué ilusión verlos vestidos con mis creaciones.

Efectivamente, eran otras épocas. Épocas en que comprar hecho era muy caro, y ponerse manos a la obra ayudaba a la economía familiar.

Y el tiempo siguió su curso, cruzamos el charco y lo que aprendí me sirvió para ganarme la vida en la vieja Europa.

Hoy al intentar enhebrar la aguja tomé conciencia del inexorable paso del tiempo y de que también necesito ayuda. Hoy soy abuela y mi vista también está cansada.


martes, 15 de julio de 2014

Deutschland, Herzliche Glückwünsche!!!


“Ist doch egal, wer der erste und wer der zweite sind, wir sind die weltbesten ARGENTINA und DEUTSCHLAND! Tolles Spiel! Besos de Ausburgo.”

Recibí este mensaje el domingo ni bien finalizó el partido del Mundial de fútbol 2014 y me emocioné. No soy una aficionada forofa del fútbol, no tengo ni idea de alineaciones, ni cuando corresponde una falta por un lado o por otro. Si sé lo que es un penal y un gol, claro. Pero del resto nada de nada. Me gusta el fútbol. Me gusta ver el Mundial cada cuatro años.

Tengo amigos, amigos de verdad de distintas partes del mundo, he compartido con ellos momentos inolvidables, momentos que se graban a fuego en el corazón por siempre, es lo que tiene vivir fuera del propio país. La convivencia hace que conozcas culturas, que valores la tuya y que crezcas como persona al participar en actividades propias de una familia italiana, inglesa, alemana, rusa, española, noruega, brasileña, colombiana, sueca, francesa, suiza, japonesa, etc., etc.
Soy muy inquieta mentalmente y me he interesado por saber, aprender y querer a las personas con las que he convivido. Mi cultura no es mejor que la de nadie, mi cultura está formada por ese crisol de razas que forma mi tierra, mi Argentina del alma mía, pero también soy un poco de cada una de las personas con las que he recorrido el camino de la vida, cosas buenas, ya que de las malas paso o las ignoro.

Cuando vivo un Mundial diversifico mis preferencias y voy con aquellos equipos en los que mis amigos vibran y sufren en cada partido. Lo disfruto y lo sufro, me alegro y me entristezco, seguramente efecto de la empatía.Yo viví el Mundial ’78 y sé lo que se siente en cada partido, salir a la calle, disfrutar con el desconocido de al lado por tus colores. También viví el Mundial en el que España ganó, la alegría de la gente, los niños, familias enteras en la calle festejando con una alegría que no tiene nada que ver con otras. Este año, después de 24 años Argentina se acercó a la final y perdió con Alemania. Estoy segura que muchos de mis amigos alemanes sabiendo el amor que le tenemos a nuestro país se han alegrado con una alegría agridulce.

Desgraciadamente muchos aborrecen a los argentinos. En general, el estereotipo que tienen de nosotros no es muy favorable, ¡qué le vamos a hacer! y muchos argentinos nos aborrecen a los que estamos fuera, creen que no representamos a nuestro país, ¡pobres! la ignorancia tiene esas cosas. 

El fútbol es así, unos ganan y otros pierden. Los dos mejores equipos del mundo llegaron a la final, Alemania primera y Argentina segunda, no está nada mal. Soy feliz por ellos y por nosotros.

Herzliche Gluckwünsche!!! Meine liebe Freunden.



viernes, 11 de julio de 2014

Cuento Sufí: La mujer perfecta



Nasrudin conversaba con un amigo.

- Entonces, ¿nunca pensaste en casarte?

- Sí pensé - respondió Nasrudin-.

En mi juventud resolví buscar a la mujer perfecta. Crucé el desierto, llegué a Damasco y conocí a una mujer muy espiritual y linda, pero ella no sabía nada de las cosas de este mundo. Continué viajando y fui a Isfahan; allí encontré una mujer que conocía el reino de la materia y el del espíritu, pero no era bonita. Entonces resolví ir hasta El Cairo, donde cené en la casa de una moza bonita, religiosa y conocedora de la realidad material. 

- ¿Y por qué no te casaste con ella?

- ¿Ah, compañero mío! lamentablemente ella también quería un hombre perfecto. 


A veces, en la vida es necesario arriesgar, experimentar, aprender, cambiar constantemente. La misma vida es movimiento, cambio, fluidez, dinamismo, flexibilidad...
"La inadaptación a lo imperfecto es lo que mejora al hombre"