miércoles, 26 de diciembre de 2012

Hablar alemán, aunque sea mal

Sé por experiencia que el idioma es muy difícil y como cualquier otro que se quiera aprender tienen que confluir diversas motivaciones. Motivaciones por todo aquello que pueda salvar la dificultad de lo que se aprende y que mantenga el interés del estudiante. Hay clases que son masivas y otras con un número limitado de personas, pero tanto en una como en otra la importancia que le atribuyo al profesor es fundamental para mantener esa motivación y también el respeto. No es lo mismo la escuela, que la universidad o una escuela de idiomas, quizás (siempre desde mi punto de vista) porque en la primera la enseñanza es obligatoria, en la segunda es optativa y en la última totalmente voluntaria. En todas, la edad también es distinta. 

Pero a lo que voy es que he tenido la oportunidad de conocer a muchos profesores, unos que amaban lo que hacían, otros que sólo iban a cumplir su labor y otros que se amaban a sí mismos. Y son estos últimos los que más daño suelen hacer. Porque no sueltan la palabra, no dejan de hablar, no dejan de alardear de sus conocimientos del idioma y se pavonean delante de sus alumnos. Son clases tediosas e interminables, esas en que los minutos son eternos y la hora no pasa. 

Hablar en público en otro idioma aunque sea entre compañeros hace que de golpe la sangre se arremoline en las mejillas, el corazón se acelere y se nos trabe la lengua. Pero eso no es lo peor de todo, lo peor es hacer el esfuerzo de comunicarte, de intentar utilizar correctamente las palabras, las declinaciones y de traducir en tu cabeza una frase (todo al unísono) mientras te miran tus compañeros y cuando lo dices escuchas que el profe dice: “Cada día hablas peor”.
Os puedo asegurar que el silencio que se produce es abrumador, como abrumador es el sentimiento que una frase como esta puede provocar en un estudiante. 

Por ello, y para finalizar decir que en la medida que los profesores no den la palabra a sus alumnos es imposible comunicarse sólo con gramática y ese es un fallo que se ve muy a menudo, sea el idioma que sea.

Basado en el artículo del diario "El Pais" 

No hay comentarios: